Proyecto Comunitario
Pan Del Tiempo – Mujeres de San Martín Caballero
El taller Pan del Tiempo fue en el pueblo de San Martín Caballero porque de allí son las increíbles cocineras de Casa Wabi: Itzel, Emi, Susana, Yesenia y Aracely. Ellas corrieron la voz e invitaron a otras mujeres a sumarse a los encuentros.
Incluso aquí, donde las deliciosas tortillas de maíz son la base de la alimentación, el pan tiene su historia, y no hizo falta preguntar mucho para escuchar a las señoras hablar de la “masa de olla” y de cómo antes hacían el pan sin levadura y a nadie le hacía mal a la panza.
Me quedo con la certeza de que hacer pan es hacer memoria, es despertar lo que ya sabemos: escucharnos y escuchar la vida de las bacterias en las masas y de nuestro camino de humanos sobre la tierra.
El taller en casa de Doña Juana fue una fiesta de manos en las masas entre historias y risas. Fue increíble ver a las mujeres orgullosas con sus panes recién salidos del horno de barro. Sus panes eran hermosos y ellas ya nombraban muchas ideas para futuros panes!
Fue muy emocionante días después del taller recibir de parte de Doña Juana sus panes de yema, por primera vez hechos solo con “masa de olla”, bellísimos y deliciosos.
Ya en mi última semana en Casa Wabi recibimos el mensaje de que las señoras querían hacer otro encuentro para hacer pizzas… y como decir que no! Pronto hicimos un festín de despedida, con pizzas de masa madre al horno de barro, y nos despedimos caminando frente al mar con abrazos de hasta pronto.
El taller Pan del Tiempo fue en el pueblo de San Martín Caballero porque de allí son las increíbles cocineras de Casa Wabi: Itzel, Emi, Susana, Yesenia y Aracely. Ellas corrieron la voz e invitaron a otras mujeres a sumarse a los encuentros.
Incluso aquí, donde las deliciosas tortillas de maíz son la base de la alimentación, el pan tiene su historia, y no hizo falta preguntar mucho para escuchar a las señoras hablar de la “masa de olla” y de cómo antes hacían el pan sin levadura y a nadie le hacía mal a la panza.
Me quedo con la certeza de que hacer pan es hacer memoria, es despertar lo que ya sabemos: escucharnos y escuchar la vida de las bacterias en las masas y de nuestro camino de humanos sobre la tierra.
El taller en casa de Doña Juana fue una fiesta de manos en las masas entre historias y risas. Fue increíble ver a las mujeres orgullosas con sus panes recién salidos del horno de barro. Sus panes eran hermosos y ellas ya nombraban muchas ideas para futuros panes!
Fue muy emocionante días después del taller recibir de parte de Doña Juana sus panes de yema, por primera vez hechos solo con “masa de olla”, bellísimos y deliciosos.
Ya en mi última semana en Casa Wabi recibimos el mensaje de que las señoras querían hacer otro encuentro para hacer pizzas… y como decir que no! Pronto hicimos un festín de despedida, con pizzas de masa madre al horno de barro, y nos despedimos caminando frente al mar con abrazos de hasta pronto.
