Proyecto Comunitario
Durante la primera sesión, una niña de unos 11 años comenzó a contar la historia de cómo
su abuelo había plantado algunos naranjos en su tierra natal, si mal no recuerdo, en el patio
trasero. Ella relató la presencia de estos árboles con la memoria de su abuelo. Las lágrimas
acaban de salir; nada podía contenerlos. Su abuelo había muerto recientemente. Supongo
que nadie quiere quejarse en público cuando es un adolescente, algo así me aterrorizó
personalmente. Demostré que nuestra relación con el paisaje natural y lo que lo constituye
(las plantas en este caso) no se basa únicamente en nuestra supervivencia. Es una
conexión útil y vital. No hay necesidad de un edificio antiguo en medio del mar, la montaña o
el desierto para entender qué es el pedazo de océano, montaña o desierto que es una
forma de patrimonio histórico. Un patrimonio que nos construye y nos constituye. Tengo la
sensación de que después de ese día, los estudiantes entraron algo nerviosos y se
dedicaron solo a «hacer tarea». Supongo que es normal reaccionar así cuando tienes 12
años y quieres que la escuela termine. Al menos así es como me sentía cuando era niño,
especialmente en los días en que hace mucho calor. Y bueno, la tierra estaba muy caliente
allí.
su abuelo había plantado algunos naranjos en su tierra natal, si mal no recuerdo, en el patio
trasero. Ella relató la presencia de estos árboles con la memoria de su abuelo. Las lágrimas
acaban de salir; nada podía contenerlos. Su abuelo había muerto recientemente. Supongo
que nadie quiere quejarse en público cuando es un adolescente, algo así me aterrorizó
personalmente. Demostré que nuestra relación con el paisaje natural y lo que lo constituye
(las plantas en este caso) no se basa únicamente en nuestra supervivencia. Es una
conexión útil y vital. No hay necesidad de un edificio antiguo en medio del mar, la montaña o
el desierto para entender qué es el pedazo de océano, montaña o desierto que es una
forma de patrimonio histórico. Un patrimonio que nos construye y nos constituye. Tengo la
sensación de que después de ese día, los estudiantes entraron algo nerviosos y se
dedicaron solo a «hacer tarea». Supongo que es normal reaccionar así cuando tienes 12
años y quieres que la escuela termine. Al menos así es como me sentía cuando era niño,
especialmente en los días en que hace mucho calor. Y bueno, la tierra estaba muy caliente
allí.
