Iván Navarro + Courtney Smith
– casa wabi 2018
Proyecto Comunitario
Paradero / Caras y Cruces – El Venado / Zapotal / Río Grande / CW
La idea principal del proyecto era poder realizar dos performances con personas de las distintas comunidades con las que trabaja la fundación y que sean aliados o participantes de los proyectos comunitarios que se realizaron en el mes de junio del 2018.
Se convocó a las mujeres pescadoras del Zapotalito, a profesores y alumnos de distintos colegios de Río Grande, del Venado y de Agua Zarca quienes participaron en los talleres comunitarios de los residentes Andrea Bores, Vanderlei Lopes, Diego Muhr y Mauricio Rico, así como personal del staff de trabajo de Casa Wabi y de los proyecto comunitarios.
Los dos performances realizados giraron en torno a entablar relaciones sociales dentro de entornos limitados y por tiempos específicos y ver cómo cambian las conductas, las conversaciones y los estados de ánimo bajo distintas circunstancias.
El primer performance se realizó dentro de una estructura de madera que limitaba el movimiento de los participantes, forzándolos a convivir con quienes tuvieran a su alrededor, mientras que otros asistentes tocaban instrumentos musicales para llenar de música los tiempos designados de convivio.
El segundo performance se realizó en la mesa principal de la casa donde se sirvió una cena con los residentes y los participantes pero con la limitación de no poder moverse del lugar asignado ni pararse de la mesa.
La idea principal del proyecto era poder realizar dos performances con personas de las distintas comunidades con las que trabaja la fundación y que sean aliados o participantes de los proyectos comunitarios que se realizaron en el mes de junio del 2018.
Se convocó a las mujeres pescadoras del Zapotalito, a profesores y alumnos de distintos colegios de Río Grande, del Venado y de Agua Zarca quienes participaron en los talleres comunitarios de los residentes Andrea Bores, Vanderlei Lopes, Diego Muhr y Mauricio Rico, así como personal del staff de trabajo de Casa Wabi y de los proyecto comunitarios.
Los dos performances realizados giraron en torno a entablar relaciones sociales dentro de entornos limitados y por tiempos específicos y ver cómo cambian las conductas, las conversaciones y los estados de ánimo bajo distintas circunstancias.
El primer performance se realizó dentro de una estructura de madera que limitaba el movimiento de los participantes, forzándolos a convivir con quienes tuvieran a su alrededor, mientras que otros asistentes tocaban instrumentos musicales para llenar de música los tiempos designados de convivio.
El segundo performance se realizó en la mesa principal de la casa donde se sirvió una cena con los residentes y los participantes pero con la limitación de no poder moverse del lugar asignado ni pararse de la mesa.
